Las y los integrantes del
Consejo Local de Promoción y Protección de Derechos de Niñas, Niños y
Adolescentes del Partido de Morón queremos manifestar nuestra preocupación por
el estado de situación del Sistema de Promoción y Protección del que formamos
parte.
Los conflictos
que tienen como actores principales a niños, niñas y adolescentes son
claramente los síntomas de un malestar profundo, de una deuda que nuestra
sociedad se empeña en no saldar. La criminalización y estigmatización de la
niñez y la adolescencia se hace posible, a través de la invisibilización de las
vulneraciones de los derechos esenciales, de la incapacidad de considerarlos
como iguales. En este contexto, los y las trabajadoras, y quienes estamos
comprometid@s en construir y afianzar un verdadero Sistema de Promoción y
Protección de Derechos, enfrentamos el desafío de combatir estas miradas
culpabilizadoras, tan penosas como masivas, mientras intentamos acompañar
situaciones acuciantes.
Es a través de
las tareas cotidianas que observamos las falencias y el abandono del sistema,
que no logra hacer pie a las demandas que la problemática plantea. La falta de
financiamiento del Sistema de Promoción y Protección de Derechos tiene impacto
directo sobre los acompañamientos, provocando nuevas vulneraciones y, en muchas
ocasiones, la frustración de las estrategias planeadas con l@s niñ@s y
adolescentes.
Nos preocupan
especialmente los servicios públicos con trabajador@s y recursos materiales
insuficientes, que obstaculizan la posibilidad de abordar cada situación con la
intensidad necesaria para una respuesta eficaz. En este sentido, también
resulta preocupante la falta de capacitación y actualización en los
dispositivos involucrados; los atrasos sistemáticos en los pagos de becas, que
muchas veces resultan en el cierre de los espacios; la inexistencia de
dispositivos para niñ@s y adolescentes victimas de abusos y violencias y para
niños y niñas menores de 15 años con consumo problemático de sustancias
psicoactivas, escenarios que reclaman urgentes y apropiadas intervenciones.
Las políticas
públicas se manifiestan tanto en las prácticas, como en la asignación de
recursos que permitan su implementación.
Nos alarma
enfrentarnos a respuestas estatales para la restitución de derechos, sostenidas
en contextos de total precariedad e inestabilidad.